Eran las 18:10 de la tarde y me encontraba en la playa después de un día duro de trabajo.Habia sido un día desenfrenado, cirugías de urgencia de todo tipo, gente que posaba su cuerpo desnudo en una camilla de quirófano, deseando que todo acabará pronto y que sus vidas volvieran a ser como antes.
El estrés en el hospital me había llevado a querer evadirme en las aguas cristalinas de la playa de Alicante…Alessandro, mi marido, había decidido bajar más tarde para reunirse conmigo y me había comentado que tenía una sorpresa para mí, algo inesperada… me dejó intrigada y mi mente no dejaba de pensar que podría ser…
Meses antes habíamos estado hablando de lo excitante y morboso que sería que el me compartiera con otro hombre… al principio todo me parecía poco normal, sinceramente Alessandro tenía todo lo que deseaba… sus ojos miel, un pelo moreno el cual podía agarrar cada vez que su cuerpo me hacía el amor…y su culo…que culo ….de esos que agarrarías y que no soltarías en un millón de años, su pene era sexy…muy sexy y no necesitaba saber cuánto medía pues lo sabía utilizar muy bien.
Hacía que mi cuerpo me llevará a las mil y una noches… por otro lado tenía una inteligencia desmesurada, sabía lo que quería y como lo quería (tanto en el trabajo como en la cama), y por ello había llegado a un alto cargo en una empresa de finanzas…
Adoraba todo de él, para que quería más??pero conforme pasaban los meses, el me iba convenciendo…me decía que no había nada que más le gustará que verme disfrutar, quería ver cómo mi cuerpo y todo mi ser se estremecía aún más… y que la situación de verme con dos hombres le producía un morbo desmesurado…
Al principio, reconozco que aunque la idea resultaba extraña y no veía porque iba a necesitar más, una parte de mi notaba como mi cuerpo poco a poco se estremecía al pensarlo, me producía un ardiente deseo de intentarlo y de ver cómo dos hombres me deseaban y como yo era capaz de darlos placer sin descuidar en ningún momento a ninguno de los dos…
Así que, lo hable con Alessandro y accedí a que buscara a alguien que encajara con lo que ambos deseábamos….
Eran ya las 19:12 de la tarde y el sol comenzaba a perder fuerza, pero mi cuerpo después de conseguir la relajación total, tras una hora de música de viento, deseaba ser tocado por el agua salada y refrescado intensamente…
Me levante de la toalla y me dirigí a que el mar lamiera mis pies y todo mi ser… di unas brazadas y al salir de las aguas cristalinas note como el frío se apoderaba de todo mi ser y como mis pezones se endurecían… mire alrededor y pude observar cómo algunos hombre observaban mi cuerpo… en aquel momento me sonroje, era tímida, mucho… pero me producía placer saber que en aquel momento era deseada por otros hombres… mi mente, como buena mujer que era, empezó a pensar…
Y así hice, salí del agua como si de una pantera se tratase…
Contonee mis caderas hasta llegar a la toalla y allí estaba el… cuatro toallas más al este en la otra dirección a la puesta del sol, un chico moreno con sus músculos perfilados pero sin ser ostentosos… Llevaba un bañador tipo boxer azul clarito y su mirada se clavaba en mi con deseo…
Dios!!que mirada más sexy… sentí que me desnudaba con ella y no me importaba, pues por mi cuerpo recorrió un latigazo de placer que me gustaba…recogí mi toalla, y dispuesta a todo, la pase por mi cuerpo como si sus manos tocaran cada centímetro de mi piel..mis ojos volvieron en su dirección y entonces vi cómo me guiñaba un ojo mientras se mordía su labio inferior…
Sonrojada estire la toalla en la arena blanca y volví a tumbarme pero esta vez mi toalla apuntaba a ese morenazo de ojos sexys que me había cautivado…
Cogi mi cacao y con mi dedo esparcí de la forma más sensual que se, el brillo en mis labios.
Le estaba llamando e imaginaba que sus labios me besaban intensamente mientras me daba la vuelta en la toalla agarrando mis muñecas …
Sin darme cuenta ya eran las 20:13 y Alessandro me llamó por teléfono:
«Buenas tardes cariño..o está mi mujer húmeda??llevo observándote hace una hora y veo que has conseguido ver mi sorpresa…»
Me quedé paralizada y empecé a observar a mi alrededor de nuevo…no podía creerlo mi marido estaba al lado del morenazo de ojos verdes con un bañador súper sexy rojo…
Dios que buenos estaban…esa era mi sorpresa dos hombres para mí y no iba a perder la ocasión
Mientras colgaba el teléfono y me sonreían pícaramente, esos dos pedazo hombres me estaban quitando el bikini a mordiscos solamente con mirarme… y la verdad … esa situación me excitaba como nunca antes lo había hecho…
Me incorporé de la toalla y Alessandro me agarro de la cintura, dándome un beso cálido pero a la vez pasional, parte de su cuerpo se acercó a mí entre pierna y note como su sexo se estaba empezando a endurecer, la situación le ponia muy cachondo…y yo le acompañaría a cumplir sus deseos…
Acto seguido, el morenazo se acercó a mí y mi corazón empezó a palpitar rápido, parecía que se me iba a salir del pecho.
Tome aire ondo y sonreí con una mirada de deseo y de placer sabiendo que sería mío…el se acercó a mí, cogiendome tmb por la cintura pero su mano se deslizó un poco más para abajo como si fuera casual aunque sabía que no, pues antes de llegar a mi oído me guiñó nuevamente el ojo…
«Buenas soy Nico (se mordió el labio nuevamente) quiero saber cómo sabes y quiero oírte gemir de placer con tu marido, quieres jugar con nosotros??»Se retiró y volvió a mirarme intensamente, me quedé paralizada, pero acto seguido mi cabeza y mi lengua, pasando por mi labio superior, le daban la afirmación q estaba buscando…ya no había marcha atrás, el juego había comenzado…
Parte II
Alessandro y Nico iban detrás de mí por la playa dirección al coche…note q observaban mi silueta que se transparentaba tras un blusón de algodón blanco de encaje y sin saber porque, o si…, me pare para colocar en el suelo unas sandalias de tacón, q llevaba entrelazadas en mis dedos de la mano derecha.
Mi culo se acentuó y mi espalda se arqueo para que pudieran ver cómo la braguita de mi bikini se marcaba en mi sexo…entonces gire la cabeza, les guiñe un ojo y en mi rostro se dibujó una sonrisa pícara.
Deseaba q ambos se acercaran y tocaran todo mi cuerpo…cuatro manos tocando cada centímetro de mi ser, cuatro manos deseando que gimiera…manos que se moverían al compás de mi cuerpo y que me llevarían al séptimo cielo…
Dios !!!si…los deseaba…y quería q se acercaran…Debí de ser muy expresiva pues Nico se acercó por detrás de mí, pego su pecho en mi espalda y acaricio mi pierna para susurrarme al oído «quiero llegar al coche ya…he hablado con Alessandro y el nos llevará a la habitación roja, la habitación del deseo…y allí pensamos hacerte nuestra…vas a saber lo q son dos hombres con la polla dura..zorra…»
Alessandro me agarro de la muñeca fuertemente para ir más rápido al coche…cuando llegamos Nico abrió la puerta de los asientos traseros y Alessandro se sentó en el asiento del conductor colocando minuciosamente el retrovisor, no quería perder detalle…y yo quería q lo viera todo…
Quise agarrar el cinturón del asiento pero Nico fue más rápido, le tenía a un centímetro de mí…olía muy bien…su perfume era fresco y a la vez muy varonil…Dios !!me estaba poniendo húmeda…sus ojos me estaban penetrando…y su respiración era cada vez más profunda y fuerte….pasó el cinturón por mi pecho rozando ligeramente el blusón..se oyó un clic, el cinturón había entrado en el agujero de seguridad y entonces Nico me susurró «quitaría el cinturón de seguridad y lo volvería a meter mil veces más, para que imagines lo q voy a hacerte después…»
Entonces pasó sus dedos por mi entrepierna húmeda…caliente…deseosa de que ambos me follaran en aquel instante …
Nico me besaba con lujuria y sus dedos se movían rápidamente en mi coño..
Alessandro se abrió la cremallera del pantalón, acto seguido su pene asomaba rígido como me gustaba a mí cuando lo metía en mi boca…q placer…
Arrancó el coche y se oyó el rugido del motor…sus manos agarraron el volante con fuerza para empezar la carrera…debía de llegar lo antes posible…
Durante la carrera en coche las luces de la calle entraban y salían por la ventanilla, Nico seguía con sus dedos jugando en mi coño y yo gemia de placer…de repente Nico paro y sacó sus dedos de mi ser para poder chuparlos..relamerlos, giró su cabeza y le dijo a Alessandro «que bien sabe tu mujer…voy a comerla el coño…»
Se puso de rodillas en mi entrepierna, el coche era espacioso, me quitó la braguita del bikini…y entonces note como un latigazo de deseo recorría todo mi ser…no paraba de jadear pues sabía q su lengua húmeda y vibrante estaba apunto de conectar con mí clitorix…
Dios!!como lo deseaba..desde el momento q sus ojos se clavaron en mi en la playa…y entonces le dije a Nico en voz alta «cómeme el coño …»si era sexy…su piel brillaba con la luz y el sudor del deseo recorría sus brazos ligeramente moldeados…
Su lengua subía y bajaba por los labios de mi sexo, tocaba mi clitorix y yo como embestidas eléctricas endurecía mis muslos y apretaba los manos contra el asiento del coche…
De arriba a abajo, con giros en mi clitorix y sus dedos penetrandome estaba consiguiendo q mis ojos se voltearan…y q mi cuerpo quisiera llegar a la máxima excitación..quería q parara pero mi cuerpo pedía más, el placer me desbordaba…no quería parar…y entonces mire a Alessandro y allí le vi…con sus ojos clavados en mi, relamiéndose….agitando su pene y jadeando…y sin poder más con la excitación mi cuerpo no resistió más y las envestidas de placer se convirtieron en estallidos continuos… y yo gritaba de placer…»aaaaaa aaaaaa aaaaa, sigue sigue aaaaa aaaaa» sentir mi coño húmedo era poco, había volado sin alas… y mi cuerpo quería aún más placer…
Pero esta vez jugaría yo y nada me pararía…